La fe en el Señor Jesús aclara nuestra
mente y nos da la visión correcta para tomar decisiones. Cuando gozamos
de una mente clara, una mente sana, como producto de la fe, gozamos
también de sus beneficios.
La mente clara no se concentra en cosas
triviales y vanas. Cuando vivimos en la fe no perdemos el tiempo
peleando por cosas sin importancia en nuestras vidas. No peleamos
batallas que no traen recompensa. Una mente clara está enfocada en
alcanzar el propósito de Dios en su vida.
La mente clara no es supersticiosa.
Muchas personas no creyentes creen en supersticiones como, por ejemplo,
no dejar que un gato negro le pase por el frente, no abrir una sombrilla
bajo un techo, no pasar por debajo de unas escaleras, que cuando suenen
las doce campanadas en despedida de año hay que hacer esto o aquello.
Pero aquellos que creemos en Jesucristo y tenemos una mente clara
sabemos que el que tiene una palabra lo tiene todo y que la fe produce
en nosotros una vida inteligente y con sabiduría, libre de la atadura de
la superstición.
La mente clara vive libre del
fanatismo. La gente fanática no está enfocada y pierde el tiempo. Por
ejemplo, los que son fanáticos de ciertos equipos de deportes se hacen
hasta enemigos de hermanos, de amigos, del vecino, simplemente porque no
apoyan al mismo equipo. Los fanáticos de novelas viven viendo los
mismos protagonistas y los mismos dramas, una y otra vez, donde los
protagonistas no son felices hasta el último capítulo. La mente sana
está enfocada y el tiempo lo invierte leyendo la biblia, orando,
haciendo el bien y trabajando para el reino.
La mente clara no es escéptica.
Algunos, antes de servirle al Señor, no creían ni en la luz eléctrica.
Pero, los que le servimos al Señor, tenemos la mente clara, somos
inteligentes a causa de nuestra fe; vemos un milagro y escuchamos
testimonios y reconocemos el poder de Dios en nuestras vidas.
La mente sana es sensible. La gente que
no tiene el nivel intelectual de la fe tiene una tendencia a la
insensibilidad. Ven a los necesitados y no hacen nada, mientras que,
los que tenemos la mente clara a causa de la fe, somos sensibles y
ayudamos al necesitado y buscamos a los perdidos.
Si algo debemos orar y pedirle al Señor
todos los días de nuestra vida es que no perdamos la cordura y tengamos
mente clara. Que podamos ver las cosas desde la perspectiva de la fe y
como Dios quiere que las veamos. No se trata de vivir enajenados del
diario vivir, sino que hemos recibido el espíritu de poder, de amor y
dominio propio en todo nuestro diario vivir.
Muchas veces la mente está inundada por
recuerdos de situaciones difíciles del pasado. Pero Dios te dice que no
hay por qué temer porque él no te ha dado espíritu de cobardía, sino
espíritu de poder, de amor, y de dominio propio. Tienes una mente
clara, que te da la ventaja que necesitas para alcanzar el propósito de
Dios para tu vida.
Tambien Estamos En Youtube con poderosas palabra la cual Dios hablara a tu vida
https://www.youtube.com/user/zedebromz/videos
Tambien Estamos En Youtube con poderosas palabra la cual Dios hablara a tu vida
https://www.youtube.com/user/zedebromz/videos
No hay comentarios:
Publicar un comentario